Extraescolares: 7 preguntas clave que los padres debemos hacernos antes de elegir

La vuelta al cole también es la vuelta a las extraescolares. Y toca elegir, y no siempre es fácil. La hay de todo tipo, lo que nos doficulta saber cuál es la que más se adapta a nuestro hijo.

Para ayudarte con la tarea, hemos preparado las que desde nuestro punto de vista son las 7 preguntas que debemos hacernos antes de elegir extraescolar para no equivocarnos.

1. ¿Cuál es el objetivo real?

La primera pregunta que debemos hacernos es si estamos buscando reforzar el rendimiento académico, fomentar algunas habilidades o capacidades concretas, mejorar la socialización o simplemente que el niño disfrute. Poner en el centro las necesidades del menor —y no solo las expectativas de los adultos, es básico si queremos dar con la tecla.

2. ¿Responde al interés del niño?

No es raro que un padre inscriba a su hija en piano porque él siempre quiso tocar un instrumento, o que un niño haga fútbol porque “todos sus amigos van”. Escuchar a los hijos y darles voz en la elección es clave para garantizar la motivación a largo plazo. padres proyectan sus propios deseos en la elección. Pregunta a tu hijo qué le gustaría probar.
Claves rápidas:

  • Escucha sus propuestas
  • Permite que tu hijo haga una prueba antes de comprometerte todo el curso

3. ¿Es adecuada a su edad?

La actividad debe adaptarse al desarrollo físico y emocional. Algunas actividades requieren madurez física o cognitiva que puede no estar presente aún. Por otro lado, debemos tener en cuenta que los niños muy pequeños, cuando salen del colegio, lo que de verdad quieren es estar con sus padres, a los que han echado muchísimo de menos durante la larga jornada escolar. Por tanto, también deberíamos preguntarnos si nuestro hijo realmente necesita esa actividad.

4. ¿Encaja con la vida familiar?

La logística importa. Horarios, traslados y duración de las sesiones deben encajar en la rutina familiar sin generar un estrés añadido. Un calendario equilibrado entre escuela, descanso, juego libre y actividades es fundamental para el bienestar infantil.

Por tanto, antes de apuntarle, revisa:
– Horarios de salida del colegio.
– Desplazamientos y tráfico.
– Tiempo libre para descansar, hacer deberes y jugar.

Una agenda demasiado apretada puede generar cansancio y estrés.

5. ¿Cuál es la calidad y formación de los monitores?

Más allá del contenido, el rol del adulto a cargo es determinante. Conviene preguntar por su experiencia, su metodología y cómo gestionan la disciplina y la motivación de los niños. Un buen monitor puede marcar la diferencia entre el entusiasmo y el abandono.

6. ¿Aprenderá disfrutando?

Las extraescolares no deberían vivirse como una extensión de las obligaciones escolares. Incluso cuando son académicas, necesitan un componente lúdico que invite a la participación. La clave está en aprender disfrutando. Hasta las actividades más exigentes deberían dejar espacio al juego y a la motivación.

7. ¿Aporta variedad frente al colegio?

A no ser que nuestro hijo necesite refuerzo en alguna asignatura, o destaque mucho en algo y queráis potenciarlo, lo ideal es que en las actividades extraescolares toque disciplinas que no se trabajen en el colegio. De esta forma, estamos ampliando su abanico de conocimientos.